El Papa Francisco expresó su deseo de que el período de confinamiento por la pandemia de coronavirus “nos ayude a comprender que es necesario no perder el tiempo que se nos ha dado”.
En un mensaje que envió a los participantes en la Jornada de sacerdotes ancianos y enfermos de Lombardía, que se está celebrando en el Santuario de Santa María del Fonte en Caravaggio, Italia, el Pontífice invitó a que este período “nos ayude a disfrutar de la belleza del encuentro con el otro, a curar el virus de la autosuficiencia”.
Subrayó que el confinamiento por la pandemia, con las restricciones de espacio, la imposibilidad de visitar a amigos y familiares, o el miedo al contagio, “con la gracia de Dios, puede ser una experiencia de purificación. También para nuestra vida sacerdotal la fragilidad puede ser como el fuego del fundidor y como el jabón de las lavanderas que, elevándonos hacia Dios, nos refina y santifica”.
“No tengamos miedo del sufrimiento”, invitó el Santo Padre. “El Señor carga la cruz con nosotros”.