“La pandemia nos trae desafíos, pero los cambios en los hábitos y las costumbres nos generan enormes oportunidades”, expresó el Presidente del Grupo Estrella, en el marco de la Septuagésima Primera Graduación Ordinaria de la UCATECI.
LA VEGA, 27 DE MARZO DE 2021 – La Universidad Católica del Cibao (UCATECI), celebró su Septuagésima Primera Graduación Ordinaria (3ra Graduación Virtual), en la que graduó 464 nuevos profesionales en las carreras de: Arquitectura, Derecho, Educación Primaria Primer Ciclo, Psicología, Bioanálisis, Enfermería, Odontología, Administración de Empresas, Contabilidad, Mercadotecnia, Ingeniería Agronómica, Ingeniería Civil, Ingeniería Industrial e Ingeniería en Sistemas de Computación. A nivel de posgrado, se entregaron títulos de Especialidad en Educación Primaria Primer Ciclo, Énfasis en Lectoescritura y Matemática; y, en Física con Orientación a la Enseñanza, así como títulos de Maestría en Administración de la Construcción, Gestión Académica, Medicina de Emergencias y Desastres, Ortopedia y Traumatología; y, Medicina Familiar y Comunitaria.
El Orador Invitado de la ceremonia fue el Ing. Manuel Estrella, Presidente del Grupo Estrella, quien en su catedra magistral, expuso:
Voy a recomendarles tres cosas, y soy reiterativo recomendándolas, porque en mi caso han contribuido en lo poco o lo mucho que me haya podido desarrollar como profesional y empresario:
Primero: participen. No se queden fuera del juego. Recuerden que lo importante no es lo que se sabe, sino lo que se hace. Ustedes serán evaluados, no solo por sus conocimientos académicos, sino por su capacidad de participación. Cada vez más, las empresas prefieren evaluar técnicos, ejecutivos, empleados, por su capacidad de participación, porque eso da una medida de su capacidad de integrarse al grupo. Por eso, es importante si ustedes cantan en el coro, si juegan un deporte, si pertenecen a alguna organización. Su capacidad de participación es una muestra de su inteligencia emocional, que se define como la capacidad de responder apropiadamente a los estímulos. Por eso les digo, vayan al terreno de juego, no se queden en las gradas. Las cosas te pasan cuando estás jugando, no cuando estás viendo el juego. No importa en qué equipo te encuentres, lo importante es participar, analizar el juego, aprender a jugar con las reglas, aprender a desenvolverte entre tus compañeros, aprender a diferenciar entre aliados y contrarios, aprender a luchar y a no darse por vencido. Participen.
Segundo consejo: tengan hambre. Hambre de trabajar más, hambre de querer más, hambre de construir más, hambre de servir más. Nunca dejen de tener hambre de prepararse, hambre de ser mejores, hambre de hacer cosas, hambre de crecer. Manténganse hambrientos de vivir en un mundo más justo. Como nos dijo Jesucristo, desde las montañas de Galilea, en el famoso Sermón de las Bienaventuranzas: “Tengan hambre y sed de justicia”, y no dejen nunca de tener hambre.
Y, finalmente, el tercer consejo: no tengan miedo. Queridos graduandos que hoy miran al futuro, “no tengáis miedo”, como dijo Juan Pablo II en su libro, “Cruzando el umbral de la esperanza”. Fíjense, aquí no estamos por casualidad. Hay una mano oculta que nos ha puesto aquí por alguna razón, esa es la mano de Dios, ese es el dedo de la Providencia. Somos parte de un plan mayor, del que solo conocemos algunos detalles. No es casualidad que ustedes hayan logrado despejar todas las dificultades para venir hoy a recibir sus diplomas de profesionales. Todo está perfectamente ordenado dentro del plan divino, como consecuencia, no hay por qué tener miedo. ¡¿Miedo a qué?! En los años 30 del siglo pasado, dentro de la Gran Depresión que sumió al mundo en la pobreza, los Estados Unidos eligió presidente a Franklin Delano Roosevelt, quien, sobre sus muletas, mandó al pueblo americano el siguiente mensaje: “A lo único que hay que tener miedo, es a tener miedo, porque el miedo nos impide convertir el retraso en progreso”.
El mundo que se abre hoy ante ustedes, queridos graduandos, por malos presagios que ustedes puedan oír, es un mundo de esperanzas, es un mundo de realizaciones, es un mundo de oportunidades, es un mundo de acción, es un mundo de sueños. Enfréntenlo sin miedos, que Dios está con ustedes. ¡Felicidades!
En la investidura, realizada por tercera vez de manera virtual, debido a la pandemia de la COVID19, también se recibieron 52 profesionales que pertenecen al Programa de Educación Superior para Adultos (PESA), en las carreras de Derecho, Psicología, Administración de Empresas, Contabilidad y Mercadotecnia, para un total de 14 carreras de Grado, cinco (5) carreras del Programa de Educación Superior para Adultos (PESA) y siete (7) programas de Posgrado. Con esta promoción, suman 20,927 el total de egresados de la UCATECI.
El discurso en representación de los graduandos fue pronunciado por la graduanda de la carrera de Psicología, Gicela Castillo Castillo, quien expresó: “El mundo en el que vivimos requiere de 3 profesionales competentes y con capacidad para innovar, que impulsen cambios sociales significativos; por eso, nos corresponde asumir el compromiso de continuar especializándonos en nuestras disciplinas”.
La Ceremonia estuvo presidida por Su Excelencia Rvdma. Mons. Héctor Rafael Rodríguez Rodríguez, Obispo de la Diócesis de La Vega, Gran Canciller y Presidente de la Junta de Directores de la UCATECI, y el Rvdo. P. Dr. Sergio de la Cruz de los Santos, Rector de la Universidad. Les acompañaron, además del Orador Invitado, la Sra. Niris Caba, Consultora en Materia de Comunicación y Asuntos Corporativos; la Sra. Digna M. Adames, Vicerrectora del Recinto Constanza; el Dr. Luis Bienvenido Gómez Luciano, Vicerrector de Investigación y Asuntos Académicos de Posgrado; la Sra. Geisha Carpio, Vicerrectora de Asuntos Académicos de Grado; y, la Sra. Ydelsa Almánzar, Vicerrectora de Asuntos Financieros y Administrativos.